Elon Musk no está muy contento con la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA). Hace unos días, su compañía aeroespacial SpaceX criticaba los lentos procesos de aprobación y escrutinio que este organismo lleva a cabo para dar luz verde al lanzamiento de sus cohetes. Y ahora sabemos que además planea denunciar a la entidad por “extralimitación regulatoria”.
El motivo detrás del enfado de Musk ha sido una decisión que la FAA acaba de hacer pública y con la que el empresario no parece estar de acuerdo: la Administración Federal de Aviación quiere multar a SpaceX con 633.000 dólares por supuestamente no cumplir con los requisitos de la licencia y no obtener la aprobación para los cambios durante dos lanzamientos en 2023.
La FAA fue tajante en su declaración: “El incumplimiento por parte de una empresa de los requisitos de seguridad tendrá consecuencias”.
El organismo hace referencia a anomalías que detectó sobre la compañía de Musk: según la FAA, SpaceX no obtuvo la aprobación para revisar su plan de comunicaciones relacionado con su licencia para lanzar desde la Estación Espacial de Cabo Cañaveral en Florida, lo que incluye agregar una nueva sala de control de lanzamiento en el Hangar X y eliminar la encuesta de preparación de T-2 horas de sus procedimientos antes de un lanzamiento en junio de 2023.
Tal y como explica la Administración Federal de Aviación, SpaceX utilizó la sala de control de lanzamiento no aprobada para la misión PSN SATRIA y no realizó la encuesta requerida.
La agencia oficial de Estados Unidos también señala que SpaceX utilizó un parque de combustible para cohetes no aprobado antes de la misión EchoStar XXIV/Jupiter en julio de 2023, mientras que el sitio solicitado era el Centro Espacial Kennedy en Florida.
“La seguridad es el motor de todo lo que hacemos en la FAA, incluida la responsabilidad legal de supervisar la seguridad de las empresas con licencias de transporte espacial comercial”, afirmó uno de sus asesores jurídicos, según relata Reuters.
Elon Musk responde contundente a la multa
Tras publicar la decisión, Musk acudió a su plataforma predilecta en lo que a sembrar polémica se refiere y dijo que SpaceX va a presentar “una demanda contra la FAA por extralimitación regulatoria”.
SpaceX will be filing suit against the FAA for regulatory overreach
— Elon Musk (@elonmusk) September 17, 2024
SpaceX tiene 30 días para responder a la FAA después de recibir las cartas de cumplimiento de la agencia.
Esta no es la primera vez que Musk se enfrenta a una sanción de este tipo: en febrero de 2023, la FAA multó con 175.000 dólares a SpaceX por no haber presentado algunos datos de seguridad a la agencia antes de un lanzamiento de satélites Starlink en agosto de 2022. Dicha multa fue pagada en octubre por la compañía.
La Administración Federal de Aviación también ha aplicado contra SpaceX otras medidas correctivas en relación con su megacohete Starship tras una investigación de unos seis meses, si bien en este caso no hubo sanciones económicas.
El propio Musk ha respondido diciendo que planea denunciar a la FAA: «SpaceX presentará una demanda contra la FAA por extralimitación regulatoria».
Elon Musk no está muy contento con la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA). Hace unos días, su compañía aeroespacial SpaceX criticaba los lentos procesos de aprobación y escrutinio que este organismo lleva a cabo para dar luz verde al lanzamiento de sus cohetes. Y ahora sabemos que además planea denunciar a la entidad por “extralimitación regulatoria”.
El motivo detrás del enfado de Musk ha sido una decisión que la FAA acaba de hacer pública y con la que el empresario no parece estar de acuerdo: la Administración Federal de Aviación quiere multar a SpaceX con 633.000 dólares por supuestamente no cumplir con los requisitos de la licencia y no obtener la aprobación para los cambios durante dos lanzamientos en 2023.
La FAA fue tajante en su declaración: “El incumplimiento por parte de una empresa de los requisitos de seguridad tendrá consecuencias”.
El organismo hace referencia a anomalías que detectó sobre la compañía de Musk: según la FAA, SpaceX no obtuvo la aprobación para revisar su plan de comunicaciones relacionado con su licencia para lanzar desde la Estación Espacial de Cabo Cañaveral en Florida, lo que incluye agregar una nueva sala de control de lanzamiento en el Hangar X y eliminar la encuesta de preparación de T-2 horas de sus procedimientos antes de un lanzamiento en junio de 2023.
Tal y como explica la Administración Federal de Aviación, SpaceX utilizó la sala de control de lanzamiento no aprobada para la misión PSN SATRIA y no realizó la encuesta requerida.
La agencia oficial de Estados Unidos también señala que SpaceX utilizó un parque de combustible para cohetes no aprobado antes de la misión EchoStar XXIV/Jupiter en julio de 2023, mientras que el sitio solicitado era el Centro Espacial Kennedy en Florida.
“La seguridad es el motor de todo lo que hacemos en la FAA, incluida la responsabilidad legal de supervisar la seguridad de las empresas con licencias de transporte espacial comercial”, afirmó uno de sus asesores jurídicos, según relata Reuters.
Tras publicar la decisión, Musk acudió a su plataforma predilecta en lo que a sembrar polémica se refiere y dijo que SpaceX va a presentar “una demanda contra la FAA por extralimitación regulatoria”.
SpaceX tiene 30 días para responder a la FAA después de recibir las cartas de cumplimiento de la agencia.
Esta no es la primera vez que Musk se enfrenta a una sanción de este tipo: en febrero de 2023, la FAA multó con 175.000 dólares a SpaceX por no haber presentado algunos datos de seguridad a la agencia antes de un lanzamiento de satélites Starlink en agosto de 2022. Dicha multa fue pagada en octubre por la compañía.
La Administración Federal de Aviación también ha aplicado contra SpaceX otras medidas correctivas en relación con su megacohete Starship tras una investigación de unos seis meses, si bien en este caso no hubo sanciones económicas.
20MINUTOS.ES – Tecnología